Por Alex Robledo
Queridx lectorx, en enero te recomendé una lista de las películas de horror, en mi opinión, más infravaloradas dentro de las franquicias comunes; esta ocasión, a propósito del mes, me permito expandir el tema para que tengas una selección interesante y disfrutes un Halloween acompañadx de los confines narrativos más peculiares de este cine:
Shock Treatment (1981, Jim Sharman)
Si nos ponemos estrictos con el sentido de la palabra, no necesariamente es una secuela; más bien, sus creadores la concibieron como una “igual” respecto a The Rocky Horror Picture Show (1975). Este capítulo únicamente recupera a los personajes de Brad y Janet, interpretados por otros actores, y explora sus vidas tras el encuentro con el Dr. Frank-N-Furter.
Cinta profeta que, entre su sátira ochentera y el delirio de sus secuencias musicales, denuncia la telerrealidad y la manipulación espectatorial a costa de la mercantilización de la salud mental. Un mensaje al servicio de nuestros tiempos.
Cementerio de mascotas 2 (1992, Mary Lambert)
Esta cinta no es cualquier secuela, es la continuación de la adaptación de uno de los libros más exitosos y terroríficos de Stephen King. Sin embargo, a diferencia de aquella, el autor no regresó para escribirla. Lógicamente hubo sentimientos encontrados.La narrativa sigue a Jeff, un adolescente, junto con su papá que descubren los secretos del cementerio indio. Su fortaleza busca el horror en los rincones más viscerales mientras recupera la atmósfera peculiar y descarnada del pueblo. Como cientos de películas habidas y por haber, prioriza el estilo sobre la sustancia y se convierte en una interesante cápsula del tiempo, todo al ritmo de ese soundtrack punk rock.
Scream 3 (2000, Wes Craven)
Desde sus inicios, la franquicia de Scream ha traído consigo una crítica meta cinematográfica; en esta entrega, la realización de una película basada en los eventos de sus predecesoras es la excusa perfecta para otro ataque de Ghostface. Por ello, Sidney, Gale, y Dewey deben unir fuerzas con sus contrapartes hollywoodenses y detener al asesino en una suerte de whodunit al más puro estilo de Agatha Christie. Si se analiza hoy, en la era #MeToo, contiene una denuncia predicha sobre los crímenes de esta industria y la relación entre el horror y el sexo. "Hollywood is full of criminals whose careers are flourishing," dice un personaje; advertencia que se pasó por alto y nadie quiso escuchar. Veinte años después habría justicia.
El hijo de Chucky (2004, Don Mancini)
Considerada como la peor en la franquicia del muñeco asesino, se convierte en una full comedy que lleva lo absurdo de su premisa a las entrañas de Hollywood: Glen, el hijo de Chucky y Tiffany, resucita a sus papás y desatan una ola de caos y asesinatos, a la par que buscan cuerpos humanos para intercambiar almas. Su trama es tan trashy que se aproxima a la visión que John Waters propondría sobre el material, tanto así que el mismísimo cineasta tiene un cameo. Una mirada al negocio de hacer cine y su sátira repetitiva, patética, asquerosa a un costo extrañamente cómico que no deja de ser fascinante.
Depredadores (2010, Nimród Antal)
La película tiene su origen en un guión que Robert Rodríguez escribió por encargo en los noventa; 20th Century Fox decidió revivirlo y produjeron un capítulo que ignora los eventos de la secuela para explorar el planeta extraterrestre y los efectos del ser humano en dicho lugar: un grupo de mercenarios acechados por las criaturas hambrientas. Un juego de vida o muerte que entretiene al más puro estilo del cine serie B, y que nos recuerda a las raíces del realizador mexicoamericano.
Saw 3D (2010, Kevin Greutert)
Aunque no pretendo defender esta franquicia, tiene un encanto dosmilero respecto a su calidad fílmica. Sí, son malas, tampoco tienen sentido, pecan de utilizar ciertos ases bajo la manga, entre otros vicios narrativos. No obstante, el supuesto capítulo final eleva el suspenso para entregarnos una cinta donde las trampas cobran vida, son más sangrientas y te retuercen el estómago, todo para incluir un giro de tuerca que obligó a la saga permanecer dormida por varios años. Salvaje y absurda, se siente como una parodia, incluso.
Que pases unos excelentes días de horror y diversión.